Nos levantamos a las 06:00 horas de la mañana en Villa Pink House, desayunamos un poco, y después de preparar una pequeña mochila, ya estábamos a punto para el Tour secreto de Rot. Al final éramos 7 personas y el guía, Rot. Como ya explicamos, la aventura era en motocicleta, por tanto nosotros decidimos arriesgarnos con ella. Había gente que no quería ir en moto y fue en furgoneta con el guía. Ya estábamos listos para empezar la aventura por la zona montañosa de Dalat.
La primera parada del Tour fue en un sitio de la región de Lam Ha que criaban grillos, saltamontes o similar. Nuestra sorpresa fue que una vez criados se pueden comer, y la verdad es que están crujientes y muy buenos, no sabríamos decir que sabor tienen pero recomendamos probarlos. Hecha la visita a este criadero seguimos la ruta hasta un mercado local de la zona dónde éramos los únicos turistas. La gente del mercado conocía a Rot, y no paró de hacer bromas con ellos, fue muy divertido. Rot nos explicó que los productos son frescos del día, que se encargan las mujeres de proveer los puestos, y que por la mañana los productos son más caros que por la tarde. A medida que íbamos pasando por puestos nos iba dando a probar alimentos. Nos arriesgamos con una especie de noodles de arroz enrollados con champiñones y maíz crujiente, un mini-crep con soja, una especie de papilla dulce con banana y azúcar, unas bolas rellenas de judía verde y un pastelito gelatinoso de judía verde también. Todo estaba buenísimo, y lo más importante es que si hubiéramos ido solos seguro que nunca los habríamos probado. Mientras comíamos la fruta nos estuvo explicando sobre las costumbres, las bodas, tareas de la casa, el idioma, gestos y símbolos vietnamitas. Fue una conversación muy didáctica, siempre está bien aprender sobre diferentes culturas a la nuestra. Hasta estuvimos jugando un rato, nos reímos un montón. Al terminar, Rot nos invitó a dar una vuelta por el pueblo y conocer más de cerca sobre su cultura. Tan cerca que nos metimos en casa de unas personas del pueblo, y con él de intermediario estuvimos interactuando con ellas, estuvo muy divertido. Una de las integrantes de la casa nos enseñó como se tejía una bufanda artesanalmente, madre mía que trabajo lleva. Antes de regresar a Dalat pasamos por una pista de voleibol, y algunos nos pusimos a practicar un poco con alguna gente vietnamita de la zona. Hacia las 16:30 horas de la tarde decidimos coger las motos y volver a Dalat, teníamos que hacer unos 50 Km. de vuelta aproximadamente. |
Después de hacer un pequeño recorrido por el mercado local, cogimos las motos y nos fuimos dirección a una fábrica de seda, dónde nos enseñaron la producción de ésta mediante los capullos de los gusanos de seda. Un trabajo bastante complicado y muy entretenido. Al rato, volvimos a desplazarnos, ésta vez hacia las Elephant Waterfalls, la entrada estaba incluida dentro del Tour. Las vistas desde arriba son bonitas si hace un día soleado, nosotros tuvimos suerte. Aprovechamos para acercarnos al corazón de la cascada también. El camino es bastante resbaladizo con unos cuantos puentes, conviene ir bien calzado y estar atento a las piedras mojadas. Las vistas desde abajo son muy impactantes ya que el agua sale a borbotones y quedas empapado. Para nosotros ir a ver éstas cascadas no entraba en nuestros planes cuando decidimos ir a Dalat, pero después de haber ido no nos arrepentimos, vale la pena. Tras ver las cascadas pusimos rumbo al pueblo de Rot, no sin antes hacer una parada en una plantación de café y otra de la planta de dónde se obtiene el curry. Llegamos al pueblo de Rot a la hora de comer y nos invitó a hacerlo en casa de un familiar. Comimos noodles con vegetales que estaban buenísimos, y aprovechamos para hacer un poco de tertulia con el resto de compañeros con los que hacíamos el Tour. Después de comer, Rot nos hizo una clase práctica de las diferentes clases de frutas que existen en el país. Nos dió a probar Mangostan, la Fruta del Jack, Sweet potato, Rambutan, Water apple, Milk apple, Longan, Fruta del Dragón y demás. Para nosotros algunas frutas eran más buenas que otras pero fue una experiencia muy interesante y enriquecedora. |
Menuda experiencia conducir por éstas carreteras algunas sin asfaltar, otras con baches, y con algunos locos al volante, pero bueno al final la experiencia fue muy emocionante y divertida, vale la pena probarlo.
Una vez en el hotel, Rot nos invitó a ir a cenar en grupo y después ir a tomar algo, accedimos la mayoría del grupo. Después de una ducha reparadora fuimos a cenar a Pho Nui un restaurante del centro con la comida muy buena y precio razonable. Comimos noodles con pollo y vegetales, y arroz con seafood con un poco de vino blanco para ambientar la noche. Al terminar de cenar nos acercamos a tomar algo al local Envy Lounge Bar, Rot nos dijo que iba a cantar para nosotros pero teníamos nuestras dudas. Pues de repente vimos que salía al escenario, cantó unas tres melodías, y sinceramente lo hizo muy bien, le dedicamos un gran aplauso. Tomamos una cerveza Tiger. Después de que cantara Rot nos fuimos a dormir que estábamos muy cansados, fue un día muy largo lleno de emociones y sensaciones.
Dalat - Vietnam
Dalat - Vietnam