A las 8:10 horas cogíamos un autobús dirección Shirakawa-go por tanto a las 7:00 horas pusimos el despertador. Dado que el ryokan estaba un poco lejos de la estación de autobuses, decidimos coger el bus local. Cuando nos levantamos cogimos nuestras mochilas y fuimos al 7 eleven a comprar algo para desayunar. En el hostel había un horario para los buses locales desde la parada Katamachi y al final nos subimos en el 54. En 10 minutos llegamos a la estación central, nos costó 200 JPY=1,4 € por persona. Mientras esperábamos en el andén el otro autobús aprovechamos para desayunar tranquilamente, el día estaba muy tapado.
Salimos puntuales de la estación de Kanazawa dirección Shirakawa-go, nos esperaba una hora y cuarto de trayecto aproximadamente. A medida que íbamos llegando a destino el paisaje iba cambiando hasta que empezamos a ver nieve, qué ilusión más grande!!! Llegamos a Shirakawa-go o el "pueblo del río blanco" a las 9:25 horas. Es conocido por sus casas típicas, de un estilo arquitectónico llamado en japonés Gassho-zukuri o "construcción con las palmas de las manos juntas", que designa las casas con el tejado muy inclinado con el fin de soportar las precipitaciones de nieve, muy abundantes en esta región montañosa. En 1995 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
El autobús nos dejó en el Centro de Información General del pueblo. Bajamos y nos fuimos directamente a cruzar el río Shogawa por el puente Deai. Una vez al otro lado fuimos al view point que hay a unos 15 minutos andando en lo alto del mirador de Shiroyama. No hacía un gran día pero las vistas resultaron ser muy bonitas con la nieve. Cuando bajamos fuimos a visitar una casa típica, en éste caso de la familia Kanda. Una antigua casa señorial, con 160 años de historia a sus espaldas y que se utilizó en las industrias de sericultura y elaboración de cerveza. Utiliza diseños de vigas tradicionales de la época y techo estilo Gassho-zukuri que se coloca en la parte principal de la casa. Ha sido nombrada bien de interés cultural junto con otra casa de nombre Wada, en el mismo barrio de la población. La entrada a la casa nos costó 300 JPY=2,1 € por persona.
El autobús a Takayama salía a las 12:15 horas, aún teníamos tiempo de ir a visitar el museo al aire libre de Gassho Zukuri Minkaen, precio 600 JPY=4,2 € por persona. Un museo conservado como patrimonio cultural de la prefectura lleno de casas y granjas de estilo Gassho-zukuri que fueron trasladadas para evitar su destrucción. Actualmente se conservan unas 25, y la ubicación es espectacular. Nos quedaron unas fotos increíbles. Al salir del museo pasamos por unos puestos de comida, y después de comprar algo para saciar el hambre nos fuimos a coger el bus dirección Takayama.
Cuando llegamos a destino estaba lloviendo y antes de ir al hotel decidimos ir a visitar diferentes monumentos emblemáticos. Empezamos por ir a Hidakokobun-ji, el templo más antiguo de la ciudad que tiene una pagoda de tres pisos que aún se conserva. En la misma calle está el restaurante Yamatake donde teníamos previsto ir a cenar, especialistas en carne de hida. Después de un buen rato dando vueltas lo localizamos y reservamos mesa. Nos apetecía mucho probar la carne.
Estuvimos paseando por los diferentes barrios de la ciudad, uno de ellos Sanmachi-suji lleno de casas bajitas de madera, algunas de ellas destilerías de sake. Ésta zona es encantadora, lástima del tiempo que no nos acompañó mucho. Aún lloviendo nos paramos a visitar el Sakurayama Hachiman-gu, un santuario que fue ampliado en el siglo XVII para ser uno de los protectores de la ciudad. Justo al lado estaba situado el salón de exposición del Festival de las Carrozas o Takayama Matsuri.
Un evento que se hace en primavera y en otoño en la ciudad de Takayama. En primavera es llamado San-no Matsuri, las doce carrozas declaradas patrimonio nacional recorren la ciudad y se organizan ceremonias tradicionales o la procesión. El diseño de cada carroza es diferente y se caracteriza por sus acabados relucientes que culminan las sofisticadas técnicas de los maestros artistas. Nosotros llegamos algunos días antes y no pudimos gozar del festival. No obstante, en la mayoría de calles había expuestas las carrozas para que la gente las pudiera ver o sino podías acercarte al salón para ver la exposición. A medio paseo nos paramos a comer en el Ebisu-honten, local con fideos soba caseros muy ricos. |
Despúes de comer seguimos dando un paseo por los barrios de la ciudad ya en dirección al hotel. Antes de llegar nos paramos en el Takayama Jinya antigua casa gubernamental del período Edo declarado monumento histórico que actualmente es un museo. Cada mañana cuenta con un mercado justo delante de la puerta principal. Al terminar de hacer unas fotos nos fuimos directos al hotel. Hicimos el check in y una vez en la habitación cogimos las cosas para ir a darnos un chapuzón en los baños termales de la azotea, menudo sitio para relajarte...sin palabras!!!
Cuando terminamos el baño nos vestimos y nos fuimos a cenar. Habíamos reservado mesa en el Yamatake Shoten y menudo acierto. Cenamos de maravilla. Menuda carne la de hida, se deshace en la boca. Después de cenar, dimos una vuelta para bajar la cena y nos fuimos a dormir exhaustos. El día siguiente temprano cogíamos un autobús hacia Kawaguchico para ver el Monte Fuji.
Takayama
Japón